lunes, 10 de diciembre de 2012
Sin límites
jueves, 22 de noviembre de 2012
Constancia
martes, 13 de noviembre de 2012
Lilium
Acababa de cruzar las puertas de una antigua catedral poco transitada, la estructura del edificio contenía una inmensidad de detalles, la decoración era preciosa y la melodía que sonaba de fondo típica de cánticos religiosos en latín le daba una ambientación que te dejaba los pelos de punta.
Me acerqué a un rincón donde se ubicaba un mueble de madera antiguo con ciertas figuras representativas sobre él. Me pregunté sobre qué fecha pudo construirse, ya que parecía el más viejo de todos, y con diferencia. De repente noté una presencia, había alguien agachado pegado a la pared. Su mirada se perdía evadiéndose del mundo real, escuchando una caja de música que portaba consigo. Era un chiquillo de aparente pobreza, tenía el pelo negro larguito, más o menos le llegaría por los hombros, pantalones cortos marrones oscuros y una camiseta vieja y sucia de un color aparentemente blanco desteñido. Dejó aquella cajita de música detrás de un ladrillo suelto que había en la pared y de repente me miró. Su rostro cambió por completo al darse cuenta de mi presencia y acto seguido se fue corriendo.
No pude evitar acercarme para ver con mayor detenimiento aquel objeto musical. Era de madera, puede que madera de roble, simple, humilde, desprendía una melodía que daba gusto oír. Resultaba plenamente tranquilizante, era una melodía preciosa. Aquella sinfonía procedente de la caja me acompañó a un mundo de paz, donde los problemas y los sufrimientos no existían. Se estaba tan bien allí... Cualquier persona daría lo que fuera por poder permanecer en aquel maravilloso lugar...
Abrí los ojos. La melodía dejó de sonar, ya que la llave que había que girar para hacerlo sonar dejó de dar vueltas. Me sentí mal, triste, apenado. Me daba mucha lástima haber descubierto que nuestro planeta no era esa maravilla aparente generalizada. Cuánta gente sufriendo, cuánta gente pasándolo mal, llorando, echando de menos a alguien, cuánta gente malvada haciendo de las suyas por todas partes... Ojalá pudiera hacer algo para cambiar eso...
Volví a girar la manivela que le daba cuerda a la caja de música y seguí escuchándola, y al hacerlo me percaté de que el cántico que sonaba de fondo en aquel lugar era la misma melodía que emanaba de aquel objeto.
Supongo... Supongo que fue creado, tanto la caja como aquel edificio, en un lugar apartado de todo ruido y malestar con el fin de transmitir un poco de paz a todas aquellas personas que todavía guardaban fuerzas para seguir creyendo que, algún día, aquel maravilloso lugar sería real.
Coloqué la caja detrás de aquel ladrillo, tal y como lo encontré, y dispuesto a marcharme, me di la vuelta y allí estaba, aquel chiquillo observando en la distancia. Le miré a los ojos y, tras transmitirme un elevado nivel de inseguridad y algo de miedo, me sonrió y caminó adentrándose en los pasillos de aquel complejo.
Realmente aquella caja era una medicina contra la negatividad del mundo, y aquel lugar era como un refugio impenetrable.
Sonreí.
Tomé mis cosas y me dispuse a salir al mundo exterior. ¿Quién sabe? Puede que algún día... No necesitemos aquella cajita.
lunes, 15 de octubre de 2012
Saltar al vacío
Abrí los ojos sobresaltado, como cuando despiertas de una mala pesadilla bruscamente. No sabía dónde me encontraba, todo era muy raro, había mucha vegetación, margaritas gigantes adornaban el paisaje en diversos puntos de aquel panorama, el sol brillaba y el cielo estaba despejado, supongo que sería sobre las 10:30 de la mañana o así de un día primaveral. No hacía ni frío ni calor, la temperatura era idónea y la verdad es que daban ganas de seguir durmiendo en aquel lugar. Luego analicé aquel extraño lugar con margaritas más grandes que yo y diversos animalitos, algunos normales, otros más grandes de lo normal.
- ¡Oye, tú!
Busqué el origen de aquella voz tan peculiar, pero no encontré nada.
- Aquí arriba desgraciado.
Alcé la mirada y allí estaba, sobre una de esas margaritas gigantescas, pero... ¿Qué era esa cosa que me hablaba? Me mantuve expectante con la mirada fija hacia aquella cosa.
- Qué pasa, ¿nunca has visto un ñu?
Efectivamente, era un ñu. Y estaba fumando. Parecía un porro.
- ¿Estoy soñando? - Pregunté un tanto extrañado -
- No lo sé, tú sabrás.
- ¿Quién eres?
- Podría decirse que alguien que vaga por tu mente. Considérame como un consejero.
- ¿Eres mi conciencia?
- ¿Tengo pintas de ser un grillo y de llamarme Pepito?
- La verdad es que no.
- Pues no hables más.
Hubo un pequeño silencio. Luego me atreví a preguntar.
- ¿Por qué me llamabas? ¿Qué querías?
- Mmmm... - Me miró con algo de recochineo. -
- ¿?
- Mira chaval, sé cómo eres, eres un buen tipo, tienes tus tonterías pero eres buena persona. Me caes bien y por ello quiero ayudarte.
- ¿A qué te refieres?
- Tan sólo escucha lo que voy a decirte. Sólo es un consejo, puedes tomarlo o ignorarlo, pero te habla la voz de la experiencia.
- Bueno, pues desenfunda.
Volvió a mirarme con algo de recochineo.
- Sé lo que quieres, cuáles son tus sueños, lo que para ti puede resultar maravilloso. Y quería decirte que no debes rendirte nunca. Si tienes un sueño debes cumplirlo como sea, sobretodo si sólo depende de ti mismo. Eso sí, no hay que pasarse de listo, pues como bien sabrás no siempre podrás cumplir esto, bien por ti, bien por otras personas, bien por la circunstancia en sí. Por ello, te invito a que dejes de pensar cosas raras y, si realmente crees que llegarás a ser feliz plenamente de algún modo, busques esa razón y te la ganes merecidamente.
- Pero... Si yo ya soy feliz...
- Pero podrías serlo más, ¿me equivoco?
- ... - Sinceramente, no sabía qué responder. -
- Lo que debes tener en cuenta también es que no por el hecho de buscarlo o merecerlo obligatoriamente vayas a encontrarlo. Ya sé que es un fastidio, pero... Quien no arriesga no gana, ¿cierto?
- ... ¿Y qué se supone que debo hacer? ¿Cómo lo hago?
- Confía en tus posibilidades y en las que te ofrezca el momento, con fuerza de voluntad y constancia lo mismo consigues tus propósitos.
- ¿Qué propósitos?
- Eso deberías saberlo tú mismo.
- ...
- Mira en tu interior, escucha qué te dice, qué es lo que quiere. Cuando lo hagas, actúa por instinto propio.
- Pero... ¿Qué pasará si lo que yo me proponga sale mal?
- Nunca lo sabrás si no lo intentas. Y ahora, vete. ¡¡Desaparece!!
Volví a despertar sobresaltado, esta vez en la calle, con amigos y amigas. Parecía que me hubiera quedado embobado en medio de la calle.
De repente X se me acercó y me preguntó.
- ¿Estás bien? ¿Te pasa algo?
- Eh... Sí sí, no te preocupes, sólo me quedé en mi mundo por unos instantes jajaja - sonreí con la mayor naturalidad posible -
- Bueno, si tú lo dices...
Aparté la vista con disimulo, y vi algo que no me hizo mucha gracia. Tuve algo así como una visión del futuro y no resultaba agradable para mi persona.
¿Qué debía hacer? ¿Qué pasaría si no hiciera nada? ¿Qué pasaría si intentase hacer cualquier cosa? ¿Mejoraría o empeoraría mi vida? Estaba confuso, por un lado creía que podría salir bien, pero por otra parte la experiencia me ayudó a desconfiar de toda buena posibilidad. Realmente, en aquel momento sólo tenía una cosa en mente y tenía la certeza de que era inalcanzable dadas las circunstancias.
O tal vez no...
¡¡¡ARGGH!!!
Desperté, esta vez en la cama. ¿Acaso todo había sido un sueño?
Me pregunto si aquel consejero realmente forma parte de mi ser e intentó ayudarme.
Bueno... Supongo que... No sé. Por lo pronto me limitaré a seguir como estoy, ya pensaré en algo.
---
Actuar o no actuar, seguir o no seguir tu instinto, ¿qué se supone que debería ser lo correcto?
¿Y tú? ¿Qué harías?
jueves, 27 de septiembre de 2012
Rainy day
domingo, 9 de septiembre de 2012
Descargado \m/
- Hola, ¿estáis en lista?
- Sí.
- ¿De qué grupo?
- "3Kpas".
- Decidme vuestros nombres para confirmar que estáis en lista, son 3 euros cada uno.
Por fin llegamos. No había mucha gente la verdad, aunque considerando la ubicación de la sala y la hora a la que comenzaba tampoco era de extrañar. Con luz tenue y música rock de fondo, jóvenes chicos y chicas se encontraban en diferentes puntos de la sala charlando, esperando a que diera comienzo el espectáculo. No pasó mucho tiempo cuando ya estaban listos para dar caña.
Primero fue "Ekkadon", un grupo de metal hardcore, el cual ya conocía de haber escuchado un EP suyo. Eran buenos, pero nunca los había escuchado en directo. Me gustó más cómo sonó allí que en la maqueta. Aún así, la mayoría permanecimos tranquilos, quietos, sin movernos mucho, puesto que acabábamos de llegar y queríamos reservar energía para "3Kpas".
En segundo lugar tocó un grupo llamado "4Sfera". A diferencia de los anteriores, éstos parecían adultos, más veteranos. La sala se llenó bastante, había mucho más ambiente que con "Ekkadon", aunque todos permanecían igualmente tranquilos. Canciones en español bastante chulas y algunas bonitas. Me recordó mucho al estilo de "WarCry".
Y por fin llegó el turno de "3Kpas". Tenía ganas de escucharlos, era la segunda vez que asistía a un concierto suyo y se me apetecía bastante la verdad, además de que necesitaba dar saltos y emocionarme al máximo, realmente necesitaba algo así... Y así fue.
Menuda la adrenalina que me recorría por el cuerpo cuando lo único que hacía era dar saltos y agitar mis brazos a la par que mi cabeza siguiendo el ritmo de sus canciones. Esa sensación de descarga en los momentos de salto, esa sensación de que nada más me importaba que mi diversión, esos momentos de reggae haciendo la conga desembocando en aquella explosión de furia, saltos y empujones... Y para mayor sorpresa, conseguí una de las maquetas que repartieron gratuitamente a los que más los apoyábamos.
Hacía tiempo que no disfrutaba tanto. Tengo que ir a más conciertos suyos. Sin duda alguna, un grupo bastante bueno, original y con estilo propio.
Puede que dentro de poco sea yo el que de el concierto, quién sabe. La verdad es que en cualquiera de los dos casos, los espero con ansia :)
Ya está bien de escritos amargos, eso se acabó, a partir de ahora todo será bueno, lo presiento. Realmente, espero no equivocarme.
Gracias a "3Kpas", a mis amigos y a mi grupo por motivarme cada día más en lo que al mundo de la música se refiere. De verdad, gracias.
domingo, 26 de agosto de 2012
Waiting for the end
- Hace poco tuve el privilegio de poder presenciar un acontecimiento un tanto curioso relacionado con un joven. Parece ser que decidió aventurarse a superar sus miedos, aunque aparentemente no mostraba signos de rechazo alguno. Digamos que asumió la situación y le echó valor al asunto. El caso es que pareció ir mejor de lo que él esperaba, al menos al principio, porque, aún sintiéndose algo raro por el cambio, no sentía nada fuera de lo común, todo seguía en orden y notaba un ambiente agradable. Pero como todo este tipo de cosas, resultaron ser efímeras, pues al caer la noche comenzó a notarse... algo distinto, pero a la vez esa sensación le resultaba familiar. ¿Sería que ese miedo que pareció superar estaba volviendo a invadir su mente? Lo mismo podría ser el cansancio, pero... ¿Y si no lo fuera?... Él procuró seguir como si nada sin darle importancia, aunque en ocasiones notaba cómo se sentía invadido poco a poco. Se le veía que en ocasiones su mirada se perdía en la inmensidad o más bien sus ojos tendían a seguir el rastro de un añorado pasado, un pasado que no parecía ser correspondido como era obvio, pues las cosas habían cambiado un poco desde entonces y ahora mismo tanto él como dicho pasado se encontraban bien tal y como estaban y no tenían intención de cambiarlo por ahora. Aunque claro, el historial de éste último indica que no fue capaz de cumplir ese mismo objetivo en su día. Exacto, no sería la primera vez que comentaba algo similar y resultó ser una farsa. Él comenzó a notarse cada vez más raro, aunque intentó disimularlo y más o menos pareció dar un no tan mal resultado, pero eso seguía sin cambiar su situación. Se dio cuenta de que en el fondo añoraba esa sensación, ese emparejamiento... Definitivamente su temor se cumplió. Puede que aún no estuviera del todo preparado, ¿o tal vez sí? La verdad creo que ni siquiera él lo supo, aunque todo indica que tira más para un lado que para otro, puesto que a la mañana siguiente sólo sentía frío y ganas de llorar. Parece ser que no recordaba la última vez que se sintió de esa forma. Pobrecillo, me pregunto qué le deparará el futuro...
- ¿Podría decirnos el nombre de aquel chico?
- Pues mira, se llamaba...
domingo, 12 de agosto de 2012
Changes
Tu vida te sonríe por fin, después de tantos meses repletos de sufrimiento, apatía, tristeza y miedos. Es como si todo lo que no pudiste o no quisiste hacer en su día lo pudieras hacer ahora, y de hecho lo estás haciendo, otorgándonos buenos pasatiempos y motivaciones con nuevas experiencias, recordando viejos tiempos y recuperando el tiempo perdido quedando en familia.
De repente comienzan a suceder cosas raras.
Algunos de tus amigos poco a poco abandonan ese grupo inseparable que fue en su día, nuevas personas llegan a tu vida, descubres cosas bastante curiosas (por decirlo de alguna forma) de personas cercanas a ti, algunas agradables, otras un tanto indeseables.
Te invade una sensación extraña. Es una mezcla de sensaciones que te hace sentir raro. No sabes realmente cómo te sientes, no sabes lo que quieres ni cómo deberías sentirte, no sabes si todo será lo mejor o no.
Sin duda es una etapa llena de cambios, algunos provocados por ti porque quisiste hacerlo, otros porque han surgido o han llegado a ti. No estás completamente seguro de si realmente quieres que esos cambios sigan adelante o no, y eso es algo que te provoca ciertos quebraderos de cabeza.
Lo que está claro es que tu vida, hoy por hoy, promete bastante. Veamos qué te depara el destino.
miércoles, 25 de julio de 2012
¿Ying o Yang?
Tened en cuenta que sois una raza inferior y, como esclavos que sois, no disponéis de ningún tipo de arma con el que hacerles frente.
Bien, ahora viene la pregunta del millón.
¿Qué haríais?
Obviamente no tiene sentido responder si nos ponemos heroicos, a uno no le sale el coraje tan fácilmente a no ser que ése sea su carácter por naturaleza.
¿Lucharíais?
¿Huiríais?
¿Os quedaríais sin hacer nada?
¿Rescataríais a los que pudierais para salir de allí?
¿Optarías por no salir de allí hasta haberlos rescatado a todos?
¿Hasta qué punto una persona arriesgaría su vida por salvarse uno mismo y a los demás?
¿Os consideráis cobardes? ¿Valientes? ¿Asustadizos?
La verdad no sé por qué escribo esto, es lo que se me ha venido a la cabeza. Supongo que es un tema... no sé, "curioso".
Pasadlo bien y disfrutad del verano chavales ~
sábado, 7 de julio de 2012
¿Mi animal favorito?
¿Por qué una cebra tiene que ser peor que uno de estos felinos? ¿Por ser herbívoro? ¿Por no ser un caballo?
Lo mismo se aplica para todos los demás animales. Todos son importantes, todos con sus virtudes y sus defectos, pero sobretodo todos son fuertes.
Fuertes por sobrevivir al día a día, por reproducirse y mantener a sus crías, por protegerlas...
¿Sabéis qué? Yo me quedo con el ñu.
Sí, es feo, tiene cuernos, cuerpo gordo y patas canijas, mató a Mufasa, sí, ¿y qué? ¿Por ello tiene que ser rechazado? Pues yo digo que no.
Demuestra ser un animal que aún con malas apariencias y además siendo herbívoro sigue ahí, viviendo el día a día, luchando por sobrevivir. Todos se abalanzan al pobre conejito que muere, "¡con lo lindo que era!" dicen, pero por un ñu nadie muestra ningún tipo de interés.
Pues simplemente por marcar diferencia, me quedo con él.
No todo es estética al fin y al cabo, ¿verdad?
sábado, 30 de junio de 2012
Diente de león
...
- ¿Y bien?
+ ... ¿?
- ¿Qué sucede?
+ ¿Cómo que qué sucede?
- Pues eso, estás raro.
+ ¿Yo? Pues no sé, yo estoy bien.
- A mí no me engañas chaval. Desenfunda, ¿a quién le tengo que partir la cara?
+ Jajaja a nadie, a nadie, no es nada de verdad.
- ¿Ves? Te pasa algo.
+ ...
- Mira, mi intención no es obligarte a que me cuentes nada, pero quiero que sepas que puedes contar conmigo para lo que sea. Y creo que ahora mismo necesitas a alguien que te escuche. No quiero verte así.
+ ... Gracias.
- No las des.
+ ...
- ...
+ No entiendo nada.
- ¿?
+ Supón que un día vas por una sabana y te encuentras un rinoceronte. Tú, obviamente, permaneces atento y sin poder quitarle el ojo de encima durante un tiempo, pero llega un momento en que ese rinoceronte pasa de ti, osea, no parece que esté interesado en embestirte o en saber qué eres. Pero aún así, tú sigues sin poder dejar de prestarle atención.
- ... Sí.
+ Pasa el tiempo, y el rinoceronte ni se inmuta con tu presencia. No hay cambios, así que optas por dejar de darle importancia y vas a lo tuyo.
- Sí.
+ ¿Qué pasaría si de repente el rinoceronte volviera a no quitarte los ojos de encima así por las buenas?
- Pues que me pillaría por sorpresa.
+ ¿Y qué más?
- Mmm... Que volvería a estar en guardia.
+ ¿Algo más?
- Y... ¿que no sabría cuáles serían las intenciones del rinoceronte?
+ Explícate.
- Que no sabría si al final iría corriendo hacia mí o si realmente no soy importante para él.
+Exacto.
- ...
+ ... ¿?
- Bueno, ¿y qué quieres decir con ésto?
+ ¿Por qué ese rinoceronte así por las buenas te presta atención de nuevo si ya era conocedor de tu presencia y optó por pasar de ti? ¿Qué intenciones tiene? ¿Qué es lo que quiere? ¿Qué es lo que siente? ¿Amenaza? ¿Curiosidad?...
Esa incertidumbre es mi problema. Aparentemente son piezas de puzle de cajas distintas, no logro ver que encaje nada de esto. ¿Pero sabes qué?
- Dime.
+ Yo paso. Me dejo llevar por el viento, que me lleve a cualquier sitio. Si me acerca al rinoceronte, bien, que no, también. Pero lo que está claro es que no pienso mover un músculo por nada. Si el rinoceronte está interesado en acercarse a mí para matar su curiosidad, que venga a mí, porque si no lo hace daré por sentado que no es su intención en mantener ningún tipo de contacto conmigo. Eso sí, una cosa que hay que tener en cuenta: El viento no siempre sopla hacia la misma dirección ni sentido. El tiempo es oro.
- Interesante reflexión. Pero... ¿de verdad estarías dispuesto a dejarte conocer por el rinoceronte? No es la primera vez que rondas por zonas así y sales malherido. Y sí, hubo un rinoceronte que era con el que erais inseparables, pero al final te hizo daño. ¿Volverías a acercarte a él?
+ Ese rinoceronte me hizo daño, sí, pero no fue su intención. Fue sin querer, como un perro cuando juega contigo y te da un arañazo o un mordisco.
Sé que ese rinoceronte se acuerda de mí, y si quiere volver a pasar el tiempo junto a mí y dejar que vuelva a cuidarlo, lo hará.
- ... ¿Y si no?
+ Si no, entonces sabré que prefiere optar por la vida que tiene ahora, que ahora mismo es feliz y que no le hace falta para nada mi presencia. Lo dejo a su elección.
-Pero... ¿quieres realmente volver? No creo que te hiciera mucho bien, la verdad...
+Es una idea que me resulta bastante satisfactoria. Hubo un error y nos hicimos daño. Ahora podremos ser más precavidos, ¿por qué no intentarlo?
Aunque claro, estoy mentalizado de que no querrá. Prefiero llevarme una sorpresa a una decepción. Como bien dije antes, si quiere volver a vivir buenos momentos junto a mí, volverá, si no seguirá con su vida. Lo dejo en sus manos.
- Pase lo que pase, te deseo suerte.
+ Gracias amigo.
Logré sacarlo de mi mente, al menos casi en su totalidad. ¿Sigo queriendo algo? No. ¿Hay interés? Sí. He ahí la diferencia. Si ese buen animal realmente quiere, que lo intente, que me busque y que muestre interés. No tiene sentido que sea yo el que siga buscando algo en todo esto. Que me demuestre que es posible.
Por lo pronto, yo estoy bien ahora mismo. El futuro juega con cuchillos y de él depende el si se desgarra o si todo va bien sin que haya estropicios.
Nada más que añadir.
sábado, 23 de junio de 2012
Pensamientos por escrito
Llevo una temporada en la que mi mente sufre constantemente un mareo inevitable, como si estuviera montado en alguna atracción de feria (de las que marean) eternamente, una y otra vez. En ocasiones esa atracción se detenía, pudiendo así mi mente poder recobrar el sentido y poder mantener los pies en el suelo, pero otras veces, al alcanzar esa situación, mi mente tomaba una actitud mucho más nostálgica, triste, como si echara de menos algo que fue muy importante para él. Entonces es cuando la atracción vuelve a ponerse en marcha.
Reconozco que en ocasiones me vuelvo un estúpido y lo pago con personas ajenas. Así son los celos. Por ello pido disculpas si en algún momento me comporté como tal y te pudieras sentir ofendida, seas quien seas, persona que está leyendo esto.
Hoy por hoy he de decir que lo que causaba eso en mí, ahora simplemente me molesta en cierto modo, pero al menos consigo mantener la calma y no exaltarme demasiado. Es mejor que nada, ¿no?
Siento que ya queda poco para que pueda volver a la rutina de siempre, pero no sé por qué intuyo que tú no. Lo que quiero decir es que, independientemente de lo que haya pasado, me encantaría poder seguir manteniendo nuestra amistad, que no se pierda esa costumbre de hablar de cualquier cosa o de quedar para ir a cualquier sitio, solos o acompañados. Pero algo me dice que tú no optarás por eso. Seguirás a tu bola centrándote en tus intereses y yo seré para ti uno más en tu lista de contactos. La verdad, espero equivocarme.
Entiendo que estas últimas semanas hayamos estado más distantes entre nosotros, pero cuando vuelva a mi rutina yo ya estaré bien y no hay excusa para seguir así. No quiero decir que quiera intentar nada, precisamente estoy esforzándome por acabar con esa atracción de feria que tanto me marea. Yo sólo quiero que podamos estar bien. Eso es todo.
Necesito acabar ya con mis exámenes, 2 días quedan.
Hay tantas cosas que quiero hacer... Pero sobretodo evadirme de todos mis pensamientos, volver a ser mi yo original y dejarme llevar por la marea.
Eso sí, que quede claro, me he llevado mucho tiempo flotando en el mar, nadando con todas mis fuerzas hacia la tierra firme por la que tanto me gustaba pasear, pero ese esfuerzo fue en vano. Por ello, no pienso volver a ser yo quien mueva un sólo músculo por nadar a cualquier sitio. Si la marea quiere llevarme a tierra firme, que sea ella quien me lleve o quien, por lo menos, dé ese primer paso. Necesito ganar la confianza de que realmente algo de eso, algo de lo que sucede, tiene sentido. Me dejaré llevar por mi instinto y punto, a favor de donde me lleve el viento.
En fin, siento el tostón, pero era algo que necesitaba decir. Espero que mi reaparición no me acarree malas consecuencias.
Bueno, sigo con lo mío, a cenar y luego a programar, a ver cómo sale el examen.
viernes, 15 de junio de 2012
Un río que fluye
jueves, 7 de junio de 2012
Recuerdos fotográficos
Es extraño, nunca antes me había pasado esto. Es como si por un lado tuviera ganas de hacer cualquier cosa pero por otra parte fuera totalmente contrario. Es un "tengo y no tengo ganas". Un sí y no.
He de reconocer que hoy por hoy me encuentro bastante mejor, podría incluso decir que voy completamente a mi bola, en mi mundo, pero en ocasiones acuden a mí esos típicos flashes momentáneos que me sacan de dicho estado. Son cosas que no puedo evitar.
Es como si mi subconsciente no quisiera deshacerse de ello.
Esto me recuerda a un texto que encontré en la web que, por desgracia, es puramente cierto en la mayoría de los casos. No sé quién es el autor, pero bueno, lo importante es el contenido, ¿verdad? Ahí os lo dejo:
"Dicen que a lo largo de nuestra vida tenemos dos grandes amores; uno con el que te casas o vives para siempre, puede que el padre o madre de tus hijos... Esa persona con la que consigues tener la compenetración máxima para estar el resto de tu vida junto a ella.
Y dicen que hay un segundo gran amor, una persona que perderéis siempre. Alguien con quien naciste conectado, tan conectado que las fuerzas de la química escapan a la razón y os impedirán, siempre, alcanzar un final feliz. Hasta que cierto día dejaréis de intentarlo, os rendiréis y buscaréis a esa otra persona a la que acabaréis encontrando. Pero os aseguro que no pasaréis una sola noche sin necesitar otro beso suyo, o tan siquiera discutir una vez más. Todos sabéis de qué estoy hablando, porque mientras estabais leyendo esto, os ha venido su nombre a la cabeza".
Pero bueno, qué más da, don't worry, be happy my friend.
Veamos qué nos tiene preparado el futuro, no creo que sea algo tan malo, ¿no?
lunes, 4 de junio de 2012
Fin
Me encantaría poder seguir en contacto contigo, pero más me gustaría el que todo pudiera volver a ser como antes.
Obviamente, eso no ocurrirá jamás, o al menos eso es lo que me das a entender.
He de reconocer que me he convertido en un monstruo con todo esto, sólo me dedico a dar por saco y a molestar, incordiar a las personas que más quiero sin quererlo (sí, tú estás entre ellas).
No sé qué me pasa.
Tal vez sea fruto de la frustración provocada por todo este acontecimiento.
Odio tener que admitir que te perdí.
Siento amargarte tantas veces con este maldito tema, pero no sabes cuánto daría porque todo pudiera volver a ser como antes.
No te he olvidado.
Y sí, sigo queriéndote.
Como ya dije en su día, ojalá pudiera acompañarte a lo largo del recorrido de tu día a día, de tu vida, ser la persona que protegiera tu alma y tu esencia. Aunque claro, si uno de los dos no quiere no hay nada que hacer...
No miento cuando te digo que te deseo lo mejor.
Y ahora, que alguien me pase una botella.
martes, 29 de mayo de 2012
Sin título
miércoles, 23 de mayo de 2012
Nada es imposible
viernes, 11 de mayo de 2012
Rimas sueltas
jueves, 26 de abril de 2012
Un mismo camino
domingo, 22 de abril de 2012
Paciencia
miércoles, 18 de abril de 2012
La complejidad del pensamiento
En multitud de ocasiones, cuando las cosas no van como pudiéramos desear somos propensos a pensar que desearíamos desaparecer del mundo, al menos temporalmente, para poder ver qué sucede, cuál sería la forma con la que actuaría la gente y esas cosas.
¿Y eso por qué?
Yo lo planteo como una reacción ante la tristeza, la depresión o la soledad, como si fueran considerables las ganas de sentirte querido, de sentir que la gente se preocupa por ti, de ver que realmente la gente te quiere aunque las apariencias no lo muestren...
Todos somos humanos, y como tales nos gusta sentirnos arropados o queridos, aunque sea de vez en cuando. No importa lo arisco que pueda llegar a ser alguien, en algún momento de su vida lo más probable es que necesite un buen abrazo de un amigo, un beso de su pareja, una caricia de un familiar...
Yo soy de los que piensan que las muestras de cariño son necesarias en la vida para poder llegar a ser plenamente felices, porque por definición, los humanos no somos una raza solitaria, siempre formamos manadas, grupos, familia, ¿quién podría ser feliz estando solo en el mundo?
Con muestras de cariño no sólo engloba los abrazos y esas cosas, los pequeños detalles que nos provocan una sonrisa de vez en cuando también se ven relacionados con esto.
Y aún así, ¿qué sentido tiene? Sólo sirve para sentirnos mal, solos, ausentes, para crear un ambiente negativo.
Por ello, yo propongo pasar de eso. ¿Cómo? Viviendo el día a día, disfrutando cada momento, aprovechando el tiempo como es debido, y si a alguno tras intentarlo no lo consigue, se merece que alguien le transmita un poco de cariño, un poco de... amor.
Obviamente, si independientemente del caso recibes algo así, ¡bienvenido sea y bendita sea la persona que lo haga!
Pero no os despreocupéis, pues cada uno tiene sus propios límites, y si se llega a un punto en el que no se puede más... cualquier cosa es posible.
¡No desesperéis, aguantad como buenos guerreros que sois!
Mucha suerte en vuestras vidas... En alguna ocasión la necesitaréis.
viernes, 13 de abril de 2012
Deseo fugaz
miércoles, 21 de marzo de 2012
"¿Po-cor?"
sábado, 17 de marzo de 2012
Hija de la Luna
Cuenta la leyenda que una princesa hermosa como la Luna misma vivía en una humilde cabaña junto al lago rodeado por un gran bosque. Muchas eran las historias que la gente narraba sobre ella, pero todas tenían algo en común: su bondad y su magia para poder alegrar cualquier elemento consciente sobre la faz de la Tierra. Se la conocía como Lady Luna.
Una noche, una malvada bruja, celosa por la admiración del pueblo hacia Lady Luna, intentó acabar con ella para poder arrebatarle esa magia que se creía que corría por sus venas y así conseguir ser el centro de atención para todos. Pero nuestra protagonista supo intuir las intenciones de la bruja, así que decidió otorgarle todo su poder a la Luna, para que siempre reluciera esbelta sobre el mar de estrellas y así impedir que la bruja se saliera con la suya.
Por desgracia, eso no consiguió evitar la muerte de la bondadosa Lady Luna, quien sin oponer resistencia sonrió mientras sufría los ataques de la bruja. Este hecho le hizo comprender que matándola no conseguiría nada excepto su propio fin debido al ataque de los aldeanos que hicieron lo imposible por vengar a nuestra protagonista.
Se dice que con el paso de los años se llevaron a cabo rituales referentes a la Luna, en honor a la difunta y querida Lady Luna, en los que se forjaban abalorios que la representaban. Se creía que estos accesorios portaban parte de su magia y servirían para repartir felicidad y amor allá por donde pasara su portador.
Toma este colgante como muestra de gratitud por los buenos momentos que le otorgas al mundo, tu bondad, tu amabilidad, tu amor y tu afecto, puesto que sólo los sabios comprenden que eres merecedora de ser portadora de algo tan valioso.
Sabes que para lo que necesites siempre tendrás un Sancho Panza a tu vera dispuesto a apoyarte en todo lo que le sea posible.
Te quiero guapísima. No lo olvides jamás.
Firmado: Un twister chiquitín.
domingo, 11 de marzo de 2012
11 de Marzo
Música. Una maravilla sonora, una delicia para los oídos, una alegría para la vista en los conciertos, un ejemplo a seguir para la voz… Es increíble cómo algo puede llegar a gustar a todo el mundo sin excepciones. Sin duda, es algo que siempre nos acompaña, nos ha acompañado y siempre nos acompañará a lo largo de nuestra vida, soportando nuestras locuras y alegrías, y consolándonos en los peores momentos.
A todos nos encanta la música, aunque no sea la misma. Cada uno adapta su concepto de música a sus gustos y, por ello, la variedad es casi infinita. De este modo, cada persona asimila como perfecta la música que le gusta escuchar.
Muchos definen a su manera la música como la mejor aliada para hacer cualquier cosa, ya sea para divertirse, para bailar, cantar, llorar o simplemente fliparse. Incluso muchos la utilizan para hacer arte, o tal vez transmitirla a los espectadores sencillamente. En cualquier caso, es obvio que sin la música, nada en esta vida cobraría sentido, todo se volvería caótico y nos veríamos envueltos en una situación de desasosiego y seriedad. Afortunadamente no es así.
Por ello, te invito a pensar qué significa para ti realmente la música. ¿No sabes cómo comenzar? Bueno, me pondré de ejemplo en tal caso para ayudar a comprender esto.
Para mí, la música es vida, ritmo, armonía y belleza, no hay nada como escuchar tu cantante o grupo favorito en un lugar maravilloso acompañado de las mejores personas que pudieras imaginar. No hay nada como tocar un instrumento para colaborar en esta orquesta mundial, nada como una gran voz que nos llene de sensaciones, que nos haga reír o llorar, nada como ver que un grupo de personas disfrutan dándolo todo por transmitirle ritmo a la vida.
Para mí, eso es música… Para mí, música eres tú.
Porque eres la música que siempre tarareo en la mente, la melodía que amansa a este pobre animal, eres la canción que me anima a ver la vida con otros ojos, eres el instrumento con el que me gustaría dar conciertos por todo el mundo durante el resto de mi vida, eres el sonido que consigue rizar los vellos de todo mi cuerpo con cada caricia, con cada mirada, con cada beso…
Yo asimilo la música como perfecta mientras sigue el ritmo de los latidos de mi corazón, puesto que, lo creas o no, eres la canción que deseo que nunca deje de resonar en mi cabeza y, por tanto, quiero hacerlo todo contigo y nada sin ti hasta el fin de los días.
Feliz cumpleaños cariño, espero que te guste y que disfrutes de este pequeño regalo =)
¿Y para ti qué es la música? ^^ ¿Me dejarías ser el príncipe que te despertase con un beso durante cada noche con cada sueño en esta historia de amor sin final?
¡¡TE AMO PRINCESA!!
I can’t say no to you… I feel good enough… Cause I love you so much.
martes, 28 de febrero de 2012
Abre paréntesis - ele - cierra paréntesis
Es sorprendente la forma de actuar que tiene el destino. Parece mentira que le guste tanto jugar con la vida de las personas, a veces para bien, a veces para mal. Estas malas situaciones pueden prolongarse durante mucho tiempo, o ser totalmente efímeras. Afortunadamente, mi vida salió de ese foso maloliente que tanto daño estaba causando, no sólo a mí, sino también al entorno.
¿Quién iba a decir que hoy fuera a cumplir 8 meses con ella?
Sí, ya sé que 8 meses es una miseria comparado con otras parejas veteranas, pero para mí esto es nuevo, nunca ninguna de las personas con las que he estado saliendo han mostrado tanto aprecio, cariño y respeto hacia mi persona, y el saber que tiene intención de seguir a mi lado me reconforta.
¿Quién iba a decir que esa angustiosa película tendría un final feliz?
¿Quién iba a decir que una persona pudiera resultar tan adictiva?
¿Quién iba a decir que yo pudiera estar dispuesto a darlo todo por ella?
¿Quién iba a decir que nos bastaría con un simple paseo o con un acurrucón en cualquier sitio para ser felices?
¿Quién iba a decir que ella sería la chica con la que siempre soñé?
Y sobre todo...
¿Quién iba a decir que, al pedir un deseo, esperase la llegada de una maravilla, y recibiera a un ángel en todo su esplendor? =)
http://www.youtube.com/watch?v=siZ38yg8Hq8
Te quiero mi niña ^^
Pd: Gracias a mis amigos y a mi hermana por estar siempre ahí :3
lunes, 20 de febrero de 2012
Sueño experimental
viernes, 3 de febrero de 2012
2º examen de conciencia
martes, 24 de enero de 2012
Frases de cine
sábado, 7 de enero de 2012
Felices Vacaciones
- Señorita - interrumpió uno de los pequeños.
- Dime querido.
- ¿Qué pedirías tú si fueras Aladdín? - preguntó con curiosidad.
- No lo sé hijo, ¿por qué lo preguntas?
- Porque sabes muchas cosas, eres como una maga sabia, y hoy, ayer y el otro parecías triste, tú siempre sueles estar sonriendo.
Hubo un momento de silencio.
- No te preocupes cielo, no es nada importante - respondió sonriendo.
- Si estabas triste tiene que ser importante, ¿no?
Entonces la expresión de la dama se vino abajo, su mirada se perdió en el infinito, y la hermosa sonrisa que alegraba a sus oyentes incluso en los peores momentos se ocultó por completo. Se mantuvo pensativa un rato, aunque ella tenía bien claro qué le pediría en el caso de que tuviera un genio de la lámpara a su disposición.
- Yo... le pediría...
Todos los presentes la observaban con detenimiento.
- ... paciencia.
- ¿Paciencia? Pero si ya eres súper paciente - respondió otro de los chiquillos.
- No del todo...
- ¿Por qué no seño?
- Yo...
*RING*
Comenzó a sonar el timbre, el timbre que indicaba el final de cada sesión.
- ¡Muy bien, se acabó la clase, que paséis un buen verano niños, felices vacaciones, nos vemos el curso que viene! - Respondió repentinamente con una sonrisa, tal vez para evitar preocupaciones, y antes de que los niños pudieran seguir insistiendo con sus preguntas, ella recogió sus cosas y se marchó. No tenía intención de seguir recordando lo que tanto la atormentaba estos días mientras tuviera distracciones con las que entretenerse. Podría decirse que su situación era un tanto extraña, pues las cosas no iban mal, aunque debido a su inseguridad y a la circunstancia en sí, se sentía mal, no porque se encontrase mal, sino porque podría encontrarse mucho mejor. Nadie consiguió saber qué rondaba por la mente de la muchacha, y ella no volvería a ser la de antes hasta que aquella tempestad llegara a su fin y se disipara ese humo denso que nublaba su vista.
martes, 3 de enero de 2012
Espejos
- Hola. -comentó esa cosa rojiza con inseguridad.
- ¿¡Hola!? -dijo Arthur sorprendido.
- No te asustes por favor.
- ¿Qué eres?
- No lo sé, ¿qué soy?
Arthur recapacitó.
- Imagino que no te habrás visto nunca en un espejo y por tanto no sabrás lo que eres. ¿Cómo es que estás aquí?
- Busco un lugar donde poder hospedarme.
- ¿Y por qué en esta casa?
- Lo he intentado en otros lugares, pero siempre me tratan mal... Hasta ahora.
- ¿Hasta ahora? -preguntó Arthur extrañado.
- Sí, has sido el único que me ha tratado con delicadeza y no ha optado por utilizarme como un juguete por el que poder divertirte, y te doy las gracias por ello. -respondió, sonriendo.
Arthur recapacitó -Mmmm... está bien, puedes quedarte. ¿Tienes nombre?
- No... siempre prescindí de uno.
No tenía ni idea de lo que era, pero creyó que sería agradable su compañía, así que decidió quedársela. Tenía muchas cosas en la cabeza, así que no se lo pensó dos veces. La llamaría Pelusa Roja.
Pasó el tiempo, y Arthur y Pelusa Roja cada vez se sentían más unidos. Es extraño tener un amigo (o amiga) así, pero era agradable. Él notaba cómo, por poco que hiciese, Pelusa Roja lo veía como una gran persona. Daba la sensación de que ella realmente no hubiera tenido muy buena suerte con otras personas que la tiraban directamente o jugaban con ella hasta que se aburrían y se deshacían de ella. Arthur vio en ella algo especial.
Se querían.
Fueron muchas las tardes que estuvieron juntos, incluso en vacaciones Arthur decidió llevársela consigo aunque sólo fueran unos días los que se ausentase. Todo iba de maravilla.
Pero notó con el paso del tiempo que ya no era lo mismo. Algo había sucedido entre ellos, pues ella se mostraba desganada, ausente. Se había perdido esa magia que disfrutaban en su día como críos. Arthur se temió lo peor, pensaba que ella se habría cansado de él, de su única compañía, del que le dio cobijo, de su amigo...
Arthur estaba enamorado de ella, pero no le importaba, le encantaba su forma de ser, de ver las cosas, su forma de tratar a nuestro protagonista. Y notaba que la estaba perdiendo.
Pasó noches en vela, con miedo de que un día Pelusa Roja abandonase su hogar y, por tanto, a Arthur. No le extrañaba, aún así, de que hubiera llegado ese momento, pues todos necesitamos nuestro espacio vital, aire para respirar, algo de libertad fuera de la monotonía. Y llevaban sin separarse mucho tiempo.
Había aprendido la lección, estaba completamente seguro de que, eso que le sucedió sin darse cuenta siquiera, no volvería a ocurrir, o al menos lo intentaría en la medida de lo posible.
Una noche, hablaron sobre el asunto, y efectivamente, ella no echaba en falta a su acompañante, pero lo quería igualmente, le aseguró que no quería deshacerse de él. Era extraño. Así que decidieron darse unos días a solas, cada uno haciendo lo que quisiera sin necesidad de permanecer junto al otro. Arthur estaría dispuesto a hacer cualquier cosa por solucionarlo, aunque debido a su inseguridad no sería la primera vez que permanece despierto gran parte de la noche o entristecido.
Hasta que llegó el día. Por fin se juntarían de nuevo, comprobarían si realmente ella se cansó de él o si podrían permanecer juntos un tiempo más.
Transcurrió un día normal, agradable dentro de lo que cabe, hasta que Arthur decidió romper el hielo con temor.
- Oye... ¿crees que esto ha mejorado? ¿has notado un cambio estos días?
- La verdad es que no...
Arthur se sintió petrificado, como si fuera una estatua resquebrajada, lo que tanto temía estaba sucediendo. Pelusa Roja continuó.
- ... la verdad es que creo que debería buscar otro alojamiento. Lo siento mucho, yo te quiero, pero creo que esto no nos está haciendo ningún bien.
Arthur no podía creer lo que estaba sucediendo. Quiso darse un tortazo en la cara para despertar de esa horrible pesadilla. No lo dudó dos veces.
¡CLAP!
Bingo, era una pesadilla.
Se sintió más aliviado que nunca. Todavía no había terminado el plazo para comprobar qué sucedería. Y sintió pánico al saber que cualquier cosa era posible.
Pero él la observó.
Sonrió.
Confiaba en ella.
Sabía que hiciera lo que hiciese sería lo mejor para ambos, aunque él deseaba no perderla jamás.
Ahora, tan sólo queda esperar y comprobar qué sucederá.